sábado, 1 de junio de 2013

El que acomoda las nubes











Espera un poco, Job, y escucha;    ponte a pensar en las maravillas de Dios. ¿Sabes cómo controla Dios las nubes,    y cómo hace que su relámpago deslumbre? ¿Sabes cómo las nubes,  maravillas del conocimiento perfecto,  se mantienen suspendidas? (Job 37:14-16)

Me encontraba sentado  mientras miraba el cielo, en ocasiones las nubes las veo como una serie de historias de creaturas que no conozco, que  alguna vez existieron. En otras ocasiones veo  las nubes como una batalla entre dos grandes naciones con bestias y grandes armas. En esta ocasión  veía con atención como relucía de entre las nubes, el frondoso y efímero relámpago. ¿Cómo podría ser que  siempre los he visto y no había visto el lenguaje diferente?

La Biblia es una constante repetición de que Dios es el dominador de todas las cosas y el mismo creador. En ocasiones  al ver el cielo, pensamos  primero en lo ardiente del sol o lo pesada de la lluvia, o la nieve. Solemos  ver el cielo desde que nacemos  y sus diferentes colores, solo en  ocasiones  decimos: “Que hermoso se ve la luna/el cielo/ el sol” pero no vamos más allá. Al parecer   Job  conocía muy bien  quién acomodaba las nubes, por ende, Eliú se lo tuvo que repetir:

Con agua de lluvia carga las nubes,    y lanza sus relámpagos desde ellas; y éstas van de un lado a otro, por toda la faz de la  tierra, dispuestas a cumplir sus mandatos.”(Job 37:12)

Piensa un momento, justo cuando llueve, cuando muchos tienen miedo, cuando  cierras las puertas apresuradamente y metes  la ropa que tenías tendida, sí, justo en ese momento…. Quizá no nos gusta sentir tan de cerca a Dios con las gotas de lluvia y los truenos aún nos intimiden,  pero Dios es Real, y   si tú te sentaras un  momento afuera, en la lluvia, en los truenos; sin duda sentirías la voz de Dios, el silencio ausente y por ende recordarías historias que marca  la biblia a través del tiempo.

¿Sabes? Dios acomoda las nubes con el aire, espera…  entonces Dios INTERACTUA CONTIGO  cuando  sopla directamente a tu cuerpo, eso quiere decir que Dios es más real  . Si El acomoda las nubes, se ha encargado personalmente, de que cuando veas el cielo tengas  una imagen viva de lo que Dios pensó en este momento.

Es entonces cuando creemos que el Señor es más real de lo que pensamos, o de lo que a veces encerramos en las cuatro paredes de la iglesia, pero te quiero decir, estimada persona, que  así como Dios interactúa, es  todos los días, per los humanos  somos tan afanados que nos olvidamos de las cosas que realmente tienen valor. Vivimos en el trabajo, escuela, familia, penosamente también en Facebook y Twitter, y no nos detenemos a  ver la textura de las hojas al caminar, en lo recio del viento,  en lo fuerte de los truenos, en lo cálido del sol.

La vida está llena de detalles de Dios, así como él te ha acomodado las nubes, sí, justo para que las veas también ha acomodado tu vida, tus situaciones, aún este momento, desde tu nacimiento, hasta tu muerte; NADA se sale del control de DIOS. ¿Te imaginas?  ¡QUE TAN PODEROSO ES NUESTRO DIOS!

Reserva un momento, piensa    y sal  afuera de tu casa, a la azotea,  al jardín y date un momento para un devocional, para platicar con el que te ve en todo momento.

Y  te dejo con esta pregunta:

“¿Puede alguno comprender la extensión de las nubes, o el tronar de su pabellón?” (Job 36:29)


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