lunes, 18 de noviembre de 2013

Entregando tu TODO a Dios










“Ama a tu Dios con todo lo que piensas, con todo lo que eres y con todo lo que vales.” (Marcos 12:30 TLA)

En este pasaje lo que nos quiere decir es sencillo de entender aunque muchos lo ignoran, y no me digas que tú en algún momento no lo ignoraste como yo también; no es “Amaras al Señor con una parte de mente, de tu corazón, de tus fuerzas, de tu ser” sino más bien,  Lo amaras con TODO (dudas, problemas, dificultades, adversidades, sentimientos, emociones, tentaciones  etc.) y TODO es todo.

En la actualidad la juventud, quiere ser tocada por Dios, quieren ser personas en constante movimiento, de orar, de sanar enfermos por medio del poder que Dios les ha dado, conocerle más, sentirlo más,  verlo en cada cosa que emprenden, y al no darles ningún resultado se deprimen, pero yo te pregunto, ¿Estas dejando TODO lo que te aleja de Él? 

Te cuento con mi testimonio, tuve una relación difícil hace unos meses, donde pasaron diversas cosas, y sobre todo la traición,  y aun con todo, seguía insistiendo, no podía renunciar al mismo dolor, me costó lágrimas, desvelos, ruegos en vano, para que nada terminara bien, pase dos meses constantes en la misma situación, y no miraba salida, corría y no salía del mismo circulo,  caminaba y no podía salir, y era imposible, mi problema no era realmente un problema, era algo que yo no había entregado a Dios y por resultado el sufrimiento, el dolor, y la decepción, hasta que Dios me dio ese pasaje entendí, aunque muchas veces lo leí no entendía, y tuve que vivirlo y golpearme para entender que no puedo amarle a medias, ni solo cuando esté disponible para él.

Este tiempo he experimentado cosas maravillosas en Él, tanto así que abrió puertas que no pensé que se abrirían, y muchas veces como pródigos, le pedimos todo a Dios, una persona con quien compartir, un buen teléfono, una buena biblia, dinero, un buen auto, o hasta incluso el mejor cuerpo, pero.. ¿De qué sirve todo eso si perdiéramos lo más importante?
Cuando amamos a medias a Dios, nos enfrentamos con el vacío, que el mismo creo para buscarle, y lastimosamente muchas veces caemos en el error de llenarlo con alguna cosa, con alguien, con algo que deseamos hacer para matar el tiempo, más que eso necesitamos estar en Su presencia, Dios no se va a revelar, ni dará visiones a necios, ni personas que a medias lo adoren, recuerdas lo que Él dijo, está buscando VERDADEROS adoradores, piensa en tu eternidad. Piensa en el futuro, y las bendiciones o maldiciones que estas heredando a tus hijos o futuros hijos, y sobre todo a esta generación que esta sedienta por amor, y a veces el amor pasajero, el cual no dura, el cual traiciona, el cual decepciona, nada comparado como Su amor, así mismo debemos amar, así mismo debemos levantar, y exhortar, y no pisotear. Pues si decimos que le amamos con TODO, pero hablamos mal del prójimo, calumniamos, damos falso testimonio, recordemos que al engañamos no es a Dios, sino a nosotros mismos, hay que asumir los errores.

Hoy te reto, si estas dejando a Dios por tu teléfono, por tu Tablet, y computadora. Es momento que ya sueltes eso, el Reino de los cielos es para los que se esfuerzan, y los que se esfuerzan tratan de buscarle, tratan de servirle, y tratan de levantar a todo aquel que necesite del verdadero amor.

No pierdas más tú tiempo dándole tu TODO a aquello que en algún momento será tu nada, la eternidad es mil veces mejor que lo pasajero.

Dios quiere revelarte cosas grandes, quiere mostrarte su gloria, pero él no se mostrará con personas a medias, que solo tienen la boca llena de palabras, pero no de hechos.