martes, 22 de noviembre de 2011

Espera, deja que Dios hable


No hablo de todos ustedes. Yo conozco a los que he escogido, pero es para que se cumpla la escritura. Juan 13:18

En la vida tenemos demasiados afanes, pero esto es resultado de dudar de Dios. Las dudas no provienen de Dios, provienen de Satanás.

Dios nos ha dicho que nos esforcemos, que creamos y nos ha dicho que todo lo podemos en Cristo que nos fortalece.

Pero, habrá momentos de prueba. Habrá momentos que pueda ser que lloremos. Habrá momentos que pueda ser que nos duela. Habrá momentos que vamos a querer tirar la toalla. Pero, nunca dejes que tu razonamiento humano te desvíe del propósito de Dios en tu vida.

Sé que tienes muchas peticiones. Sé que tienes muchos anhelos. Sé que tienes muchos sueños. Sé que tienes muchas metas en tu vida. Pero, debemos estar conscientes de que Dios buscará cumplir su propósito en nosotros. 

Como hijos de Dios debemos esperar en Dios. Debemos aprender a esperar en Dios. 

En este momento quiero que te detengas. Quiero que le preguntes a Dios si lo que estás haciendo es la voluntad de Dios. Quiero que ores y le preguntes a Dios qué es lo que quiere para tu vida. Quiero que ores y le digas a Dios que cumpla su voluntad en tu vida.

Es ahí donde tu corazón será contrito y humillado ante Dios. Es ahí donde tu adoración será en espíritu y en verdad. ¿Por qué? Porque estás diciéndole que Dios es primero que todo. Estás diciendo que la voluntad de Dios es sumamente perfecta. Estás diciendo que Dios es perfecto. Estás diciendo que aceptas a donde quiera que Dios te lleve.

Detente, ora de nuevo. Agradece a Dios lo que hará en tu vida. Quiero esta tarde que adoremos por completo. La adoración no es cantar una linda alabanza. La adoración inicia cuando empezamos a hacer lo que cantamos. 
Ahora quiero que abras un documento de Word en tu computadora, hagas el listado de lo que tú quieres y hagas el listado de lo que Dios te dijo que quiere para tu vida.

Cuando lo veas te darás cuenta que los planes de Dios, muchas veces, al inicio pueden parecer ilógicos. Pero, al final son hermosos, perfectos y grandiosos. Recuerda: La Biblia hay que leerla, creerla y vivirla.



No hay comentarios:

Publicar un comentario