martes, 13 de diciembre de 2011

Callémonos y oremos


Santiago 4:11 Hermanos, no habléis mal los unos de los otros. El que habla mal de su hermano, y juzga a su hermano, este tal habla mal de la ley, y juzga la ley; pero si tú juzgas a la ley, no eres hacedor de la ley, sino juez.

Como hijos de Dios no podemos terminarnos a nuestros hermanos. Lastimosamente, hemos sido el peor ejército de la historia. Hemos dejado tirados a nuestros soldados que caen en batalla. Hemos abandonado nuestra función en el campo de batalla.

Santiago es claro no hablemos mal de los unos de los otros. Nuestra lengua, dice Santiago, tiene un poder que ni no nosotros tenemos idea. Nuestra lengua puede trascender hasta problemas que ni idea tenemos.

Nuestra vida tiene que ser con la mirada en Jesús. No podemos estar dependiendo de lo que pensamos que es bueno  o malo, para decir algo o no. Tenemos que basarnos en la voluntad de Dios.

Ya como hijos de Dios debemos basarnos en la única voluntad real, en la de Dios. Nuestra mirada debe estar puesta en el testimonio de Jesús, tal cual la Biblia lo dice. 

Jesús mismo buscó darle la gloria al Padre. Él nunca buscó su propia gloria. Nosotros como hijos, lastimosamente, buscamos lo que nosotros queremos. El cristianismo no es buscar lo nuestro, es buscar la gloria de Dios.

Como hijos de Dios no podremos cumplir, verdaderamente, la voluntad de Dios, vivir para la gloria de Dios, si no conocemos a Dios.

A Dios no llegamos por respetar a nuestras autoridades. A nuestras autoridades las respetamos si primero llegamos a Dios. El darle la gloria a Dios, debe ser con toda nuestra vida. Nuestra vida debe de ser de acción de gracias.

Nuestros ojos deben ser como la mirada de Jesús. Nuestra boca debe hablar lo que Dios manda.

Ya tenemos que parar de buscar lo nuestros. Debemos buscar lo que Dios quiere de nosotros. Dios quiere darte vida en abundancia, pero todo esto es referente a tu vida espiritual. No denigremos a Dios diciendo que el nos dará todo lo material que necesitamos materialmente. Dios nos dará todo lo que necesitamos espiritualmente.

La vida como hijos de Dios, no es buscar dinero o fama. La vida como hijos de Dios es buscar la voluntad de Dios. Debemos tener cuidado con nuestra lengua, porque ella es una de las cosas que más problemas nos trae. Busquemos siempre la gloria Dios.



http://www.facebook.com/pages/Tu-Unica-Alternativa/194021963941574
http://www.facebook.com/Tuunicaalternativa

No hay comentarios:

Publicar un comentario