La creación aguarda con ansiedad la revelación de los hijos de Dios. Romanos 8:19
La molécula del ADN (acido desoxirribonucleico) es la unidad elemental a partir de las cuales se conforman los genes. Es por eso que el ADN determina las marcas individuales de una persona. Su identidad.
Cuando pensamos en la revolución que la nueva generación de jóvenes cristianos está llamada a producir en el mundo, hay que notar que los revolucionarios siempre tuvieron ciertas marcas que los acompañaron. Una especie de ADN que marcó su comportamiento. Estos siempre fueron personas de
DESTINO
ACCIÓN
NEGACIÓN DE SÍ MISMOS
Pensemos por un momento: Para hacer una diferencia hay que ACTUAR. Cuando nuestro cristianismo se limita a creer o decir lo que es correcto pero a no hacer nada al respecto, terminamos sin dar un testimonio concreto y poderoso de quién es Cristo. Los revolucionarios siempre fueron personas de ACCIÓN. También fueron mujeres y hombres que sabían que habían sido elegidos para llevar a cabo lo que anunciaban. Entendían que hacerlo era su DESTINO, y por ultimo estaban dispuestos a pagar el precio. Eligieron el camino de NEGARSE A ELLOS MISMOS. Pasaron todo tipo de incomodidades, fueron más allá de sus posibilidades y estuvieron dispuestos a renunciar a ellos mismos en numerosas ocasiones para que otros pudieran obtener un beneficio.
Punto de reflexión:
¿Cómo puedo ayudar a la iglesia a marcar la diferencia en este mundo?
¿Cómo puedo activar las tres características que tienen los revolucionarios en mi vida?
No hay comentarios:
Publicar un comentario