No
bien decía: “Mis pies resbalan”, cuando ya tu amor, Señor, venía en mi ayuda.
Cuando en mí la angustia iba en aumento, tu consuelo llenaba mi alma de
alegría. (Salmos 94:18-19)
Recuerdo
una vez en mi escuela secundaria, tenía un examen de Física. Debo admitir que
no me gustaba esa materia, jamás prestaba atención en clases, pero a la hora de
dar un examen estudiaba y salía bien. Un día me tocó prepararme para dos
exámenes el mismo día, física e historia. Pensando que física me sería fácil,
no estudié y preferí sacarme buena nota sólo en historia.
Cuando me
dieron la hoja del examen de física para empezar a hacerlo, me resultó muy
fácil. Hice el primer ejercicio, el segundo, el tercero…y me detuve en el
cuarto. ¡No sabía cómo hacerlo! Tenía que salir bien para aprobar la materia,
me trabé en ese ejercicio y no pude continuar hasta que cinco minutos antes de
que acabara la hora, decidí pedirle ayuda a la profesora. Yo le dije
“Profesora, mire, hago éste ejercicio del modo que usted lo explicó pero no me
da el resultado”, a lo que ella riendo me dijo “¡Es que tenías que preguntarme
a mí, hay un dato mal en ese ejercicio, claro que no iba a darte resultado!”.
¿Qué quiero
decir con esto? Muchas veces intentamos hacer todo por nuestros propios medios,
damos nuestro mayor esfuerzo, luchamos, buscamos distintas formas de superar
algo, y el Señor ahí es cuando nos dice “Es que tú aún no estás preparado,
tienes que buscarme a Mí”. Yo no estaba preparada para ese examen, y por
capricho no quise pedirle ayuda a la profesora, hasta que me decidí y salí bien
gracias a que ella me dijo cómo hacerlo.
Leyendo el
salmo que está más arriba, me di cuenta que aunque nosotros pongamos a Dios
muchas veces como nuestro último recurso, para Él nosotros siempre seremos su
primer recurso. “No bien decía: Mis pies resbalan…” ¡Dios no te deja terminar
la frase y te dice: Aquí estoy! Él en su infinito amor tiene las respuestas a
todo lo que te sucede, sea un problema, sea una duda, sea un temor, sea una
oportunidad, Él ya sabe lo ocurrirá en tu vida, déjalo entrar y que sea Él
quien la controle.
“Cuando en
mí la angustia iba en aumento…”, Dios no espera a que tú estés deprimido, sólo,
triste o angustiado para ayudarte, Él antes de que tú lo busques ya está
dispuesto a consolarte. ¿No es Perfecto su amor? No permitas que nadie te diga
que estás sólo o que no vales la pena, ante los ojos de Dios tú eres su Hijo o
Hija, y no hay nada que Él más desee que consolarte.
¿Aún no
entiendes? En el Salmos 34:15 dice “Los
ojos del Señor están sobre los justos, y sus oídos, atentos a sus oraciones”.
¿Qué significa? Que no sólo Dios te está viendo constantemente con sus ojos, no
solamente ve cómo te sientes, sino que también te escucha. Él escucha tus
ruegos, a cada oración Él siempre te responde: Aquí estoy.
Muchas
veces no entendemos las cosas que nos suceden en nuestro diario vivir, no
sabemos si a veces son pruebas, son consecuencias o son trabas que nos pone el
enemigo; pero sí entendemos y sabemos que tenemos un Dios que todo lo puede y
todo lo supera. Dios no te prometió días sin dolor, pero Él sí te prometió
fuerzas para cada día, consuelo para las lágrimas y Luz para el camino.
“Sólo nos queda decir que, si Dios está de
nuestra parte, nadie podrá estar en contra de nosotros. Dios no nos negó ni
siquiera a su propio Hijo, sino que lo entregó por nosotros, así que también nos
dará junto con él todas las cosas. ¿Quién puede acusar de algo malo a los que
Dios ha elegido? ¡Si Dios mismo los ha declarado inocentes! ¿Puede alguien
castigarlos? ¡De ninguna manera, pues Jesucristo murió por ellos! Es más,
Jesucristo resucitó, y ahora está a la derecha de Dios, rogando por nosotros”.
Romanos 8:31-34
No sólo
tenemos un Dios que todo lo puede y todo lo supera, sino que tenemos un Dios
que está de nuestra parte. Un Dios que entregó a su hijo y nos prometió un sin
fin de cosas sin contar una vida eterna llena de felicidad.
¿Alguien
acaso puede decirnos algo que realmente pueda lastimarnos? ¿Alguien acaso puede
castigarnos, cuando Cristo nos libró de toda cadena? Nadie podrá estar en
contra de nosotros, sea un líder, un pastor, un amigo o un familiar, nadie
debería de tener el derecho de hacerte caer. No permitas que nadie te lastime,
recuerda que ninguno de ellos murió en la cruz por amarte. Hoy levántate,
Jesucristo está rogando por ti.
http://www.facebook.com/pages/Tu-Unica-Alternativa/194021963941574
http://www.facebook.com/Tuunicaalternativa
No hay comentarios:
Publicar un comentario