Porque ésta es la voluntad de Dios: que, practicando el bien, hagan callar la ignorancia de los insensatos. 1 Pedro 2:15
Sé por experiencia personal que cuando la gente comienza a criticar y a perseguirte porque tu vives por fe, tu reacción humana y natural es la de querer vengarse. Es fácil el querer comenzar a difundir un poco de la misma crítica de ellos. Tu puedes pensar: “Bueno, a lo mejor si prueban un poco de su propia medicina dejen de estar criticando y hablando de otros.”
¿Pero sabes qué? No lo harán. Sus palabras simplemente añadirán combustible al fuego, y te criticarán más fuertemente, y en voz más alta de lo que lo hicieron antes. Sin embargo, según la Palabra de Dios, hay una manera de callarlos. No discutiendo con ellos. Ni defendiéndose, sino guardando silencio y continuando haciendo las buenas obras que Dios te ha llamado a hacer.
Jesús fue criticado duramente por la religión establecida de Su tiempo. Pero él nunca contraatacó. Al contrario, Hechos 10:38 dice que El simplemente anduvo haciendo el bien. Cuando la gente comience a ridiculizarte por vivir la vida de fe, se como Jesús: sigue bendiciendo a la gente. Sigue orando por personas que son oprimidas por el diablo y libéralas. Sigue poniendo las manos sobre los enfermos. Sigue haciendo lo que Dios te ha llamado a hacer.
Eso le molestará al diablo porque tu principal propósito es el de hacerte a ti ineficaz para el reino de Dios. Satanás quiere que tú estés involucrado en la crítica. Quiere distraerte para desviar tu atención del trabajo que Dios te ha dado. El diablo realmente quiere que tú te rindas. ¡NO LO HAGAS! En lugar de eso, sigue las instrucciones de 2 Timoteo 3:14 “permanece firme en lo que has aprendido y de lo cual estás convencido.” Acalla las críticas ignorantes de los hombres al continuar haciendo el bien, y viviendo por fe. Y cuando se hayan desvanecido todas sus palabras, tú todavía permanecerás firme.
Lee y medita: Lucas 23:1-9
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