Se trata de Dios

Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. (Romanos 10:17)

En este devocional vamos a corregir una enseñanza que se ha hecho por tradición. Me refiero al texto base que tenemos en la lectura. Muchos dicen; “La fe viene por el oír y por oír la palabra de Dios”, si leemos detenidamente, entenderemos que se cambia todo el contexto del versículo. 

En el texto hay una gran verdad y una gran orden que Dios nos manda a cumplir. Muchos podemos venir a decir que tenemos fe, y se habla mucho de la fe en las iglesias. Sin embargo, ¿Se lleva a las personas a que estudien la Biblia? Debemos entender que la revelación de Dios únicamente es en LA BIBLIA. Si no estudiamos la Biblia, ¿Conocemos la fe? ¿Escuchamos a Dios? O incluso, ¿A que “dios” estamos escuchando?

No estoy diciendo que los predicadores no sean ocupados por Dios, a lo que me refiero es que todo lo que se nos enseña debe ser pasado por la Biblia. A la iglesia no sólo se va a saltar y a gritar “amén” sólo porque se escucha bonito lo que dicen. En la iglesia se debe predicar de la palabra de Dios.

Algunos me pueden decir: En mi  iglesia me hablan de la Biblia, ¿Has estudiado la Biblia y estás seguro/a de que lo que te enseñan lo dice la Biblia? La Biblia habla, la verdad, la Biblia habla del testimonio de nuestro Señor Jesús.  Lucas 24:44 “Y les dijo: Esto es lo que yo os decía cuando todavía estaba con vosotros: que era necesario que se cumpliera todo lo que sobre mí está escrito en la ley de Moisés, en los profetas y en los salmos”. El texto que acabamos de leer, son palabras de Jesús.

Ahora bien, la Biblia no dice “que vayas a la iglesia y que Dios te dará todo”, la Biblia habla de ir a Dios y que NOSOTROS le demos todo a Dios: Mateo 16:24 “Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame”. Incluso, se predica a Dios como un milagrero, como bando o club social. Efesios 5:17 “Así pues, no seáis necios, sino entended cuál es la voluntad del Señor”.

Romanos 12:2 “Y no os conforméis a este siglo; mas transformaos por la renovación de vuestra alma, para que experimentéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta”. 

Job 42:10 “Y tornó el SEÑOR la aflicción de Job, orando él por sus amigos; y aumentó al doble todas las cosas que habían sido de Job”.

Yo no digo que Dios no te pueda bendecir, claro que lo puede hacer. Pero, debes entender que la voluntad de Dios va mucho más allá del dinero, de los milagros, la voluntad de Dios es para que crezcamos espiritualmente y todo eso es para la gloria de Él. Job 42:5-6 “De oídas te había oído; mas ahora mis ojos te ven, Por tanto me aborrezco, y me arrepiento En el polvo y en la ceniza”. Te podrás preguntar “¿Qué tiene que ver el primer texto con todo esto?” Es fácil la respuesta: ¿En qué tienes puesta tu esperanza? Si tu esperanza ha crecido porque has estudiado la palabra de Dios y te has dado cuenta que sea en riqueza o en pobreza Dios siempre se lleva la gloria, vas por buen camino. Pero, si crees que Dios es riqueza económica y sólo puros milagros estás equivocado: Job 1:21 “y dijo: "Desnudo salí del vientre de mi madre Y desnudo volveré allá. El SEÑOR dio y el SEÑOR quitó; Bendito sea el nombre del SEÑOR."  

Dios te bendiga.

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