Se hace lo que Dios dice

Los planes son del hombre; la palabra final la tiene el Señor. (Proverbios 16:1)

¿Cuántas veces hemos querido forzar la voluntad de Dios y hacer las cosas a nuestro antojo? La respuesta a ello no es “muchas”. La respuesta es: Las consecuencias de querer hacer las cosas por nuestros medios y no esperar en Dios, son duras.

Paso a paso la vida va avanzando y los tiempos de Dios se van manifestando en nosotros. Pero los tiempos de Dios no son en nuestro tiempo o cuando nosotros queremos que sucedan los milagros.

Hace falta entender la soberanía de Dios y darle la gloria a Él por todo. Así como glorificamos a Dios por sanidades, también hay que glorificarlo porque Él decidió llevarse a nuestro familiar o simplemente no ha querido sanarnos.

Debemos de tener en claro que Dios nunca busca nuestro mal, Dios siempre busca nuestro bien, pero lo busca para que nosotros le demos toda la gloria a Él por lo que sucede en nuestra vida.

Nuestras posiciones como cristianos, muchas veces, han sido objeto de burla. Lamentablemente nosotros tenemos la culpa de que se burlen de Dios, ya que cuando Dios nos responde “sí” a alguna petición sí le damos la gloria a Dios, pero cuando Dios responde “no” le echamos la culpa a los seres humanos o ponemos miles de excusas. Es ahí cuando las personas se burlan de nuestra fe y dicen que creemos en Dios sólo cuando nos conviene.

También hay un problema que está achacando a algunos cristianos, y es que creen más en lo que dice un libro que en lo que la Biblia dice. Hay ocasiones en las cuales saben más lo que dice un libro que lo que la Biblia dice. Incluso, creen más a lo que dice su pastor a lo que la Biblia manda y el resultado de todo eso es que cuando no sucede lo que creen de boca de hombres, se enojan con Dios, y nuevamente Dios es objeto de burla.

Mis hermanos, Dios es el que tiene la última palabra en todo. Muchas veces profesamos confiar en Dios, creerle a Dios, amar a Dios, pero cuando viene alguna adversidad lo primero que hacemos es salir corriendo a realizar alguna locura, y nuevamente Dios es objeto de burla.

Reitero, Dios es el que tiene la última palabra. Podemos hacer mil planes, podemos decir que seremos empresarios, podemos decir que seremos los mejores médicos, periodistas, fotógrafos, etc., pero si Dios quiere que dejes todo y le sirvas a Él, Él dará la orden y tenemos que obedecer.

Es momento de creer en verdad en Dios y lo que manda en Su palabra. La Biblia es lo primero que debemos de escudriñar al momento de tomar una decisión en nuestra vida y hablar con Dios si está dentro de Su voluntad. Ya no actuemos en base a lo que nos parece bien a nosotros como humanos, actuemos en base a los planes de Dios, preguntando si lo que haremos le glorifica o no.

Recuerda que la Biblia hay que estudiarla, creerla y vivirla. Dios te bendiga.

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