“Ama a tu Dios con todo lo que
piensas, con todo lo que eres y con todo lo que vales.” (Marcos 12:30 TLA)
En este pasaje lo que nos quiere
decir es sencillo de entender aunque muchos lo ignoran, y no me digas que tú en
algún momento no lo ignoraste como yo también; no es “Amaras al Señor con una
parte de mente, de tu corazón, de tus fuerzas, de tu ser” sino más bien, Lo amaras con TODO (dudas, problemas,
dificultades, adversidades, sentimientos, emociones, tentaciones etc.) y TODO es todo.
En la actualidad la juventud, quiere
ser tocada por Dios, quieren ser personas en constante movimiento, de orar, de
sanar enfermos por medio del poder que Dios les ha dado, conocerle más,
sentirlo más, verlo en cada cosa que emprenden,
y al no darles ningún resultado se deprimen, pero yo te pregunto, ¿Estas
dejando TODO lo que te aleja de Él?
Te cuento con mi testimonio, tuve una
relación difícil hace unos meses, donde pasaron diversas cosas, y sobre todo la
traición, y aun con todo, seguía
insistiendo, no podía renunciar al mismo dolor, me costó lágrimas, desvelos,
ruegos en vano, para que nada terminara bien, pase dos meses constantes en la
misma situación, y no miraba salida, corría y no salía del mismo circulo, caminaba y no podía salir, y era imposible,
mi problema no era realmente un problema, era algo que yo no había entregado a
Dios y por resultado el sufrimiento, el dolor, y la decepción, hasta que Dios
me dio ese pasaje entendí, aunque muchas veces lo leí no entendía, y tuve que
vivirlo y golpearme para entender que no puedo amarle a medias, ni solo cuando
esté disponible para él.
Este tiempo he experimentado cosas
maravillosas en Él, tanto así que abrió puertas que no pensé que se abrirían, y
muchas veces como pródigos, le pedimos todo a Dios, una persona con quien
compartir, un buen teléfono, una buena biblia, dinero, un buen auto, o hasta
incluso el mejor cuerpo, pero.. ¿De qué sirve todo eso si perdiéramos lo más
importante?
Cuando amamos a medias a Dios, nos
enfrentamos con el vacío, que el mismo creo para buscarle, y lastimosamente
muchas veces caemos en el error de llenarlo con alguna cosa, con alguien, con
algo que deseamos hacer para matar el tiempo, más que eso necesitamos estar en
Su presencia, Dios no se va a revelar, ni dará visiones a necios, ni personas
que a medias lo adoren, recuerdas lo que Él dijo, está buscando VERDADEROS adoradores,
piensa en tu eternidad. Piensa en el futuro, y las bendiciones o maldiciones
que estas heredando a tus hijos o futuros hijos, y sobre todo a esta generación
que esta sedienta por amor, y a veces el amor pasajero, el cual no dura, el
cual traiciona, el cual decepciona, nada comparado como Su amor, así mismo
debemos amar, así mismo debemos levantar, y exhortar, y no pisotear. Pues si
decimos que le amamos con TODO, pero hablamos mal del prójimo, calumniamos,
damos falso testimonio, recordemos que al engañamos no es a Dios, sino a
nosotros mismos, hay que asumir los errores.
Hoy te reto, si estas dejando a Dios
por tu teléfono, por tu Tablet, y computadora. Es momento que ya sueltes eso,
el Reino de los cielos es para los que se esfuerzan, y los que se esfuerzan
tratan de buscarle, tratan de servirle, y tratan de levantar a todo aquel que
necesite del verdadero amor.
No pierdas más tú tiempo dándole tu
TODO a aquello que en algún momento será tu nada, la eternidad es mil veces
mejor que lo pasajero.
Dios quiere revelarte cosas grandes,
quiere mostrarte su gloria, pero él no se mostrará con personas a medias, que
solo tienen la boca llena de palabras, pero no de hechos.